El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se reunió este lunes a los principales dirigentes de la CGT. El encuentro tuvo lugar tras la reglamentación del capítulo laboral de la Ley Bases y las tensiones por la marcha universitaria de este miércoles, en rechazo al anunciado veto de Javier Milei a la ley de financiamiento para las casas de altos estudios.
la central obrera insistió en que participará de la movilización de este miércoles. “Apostamos al diálogo sin descartar medidas. Queremos hacer razonar al gobierno nacional”, sostuvo Gerardo Martínez y remarcó: “La marcha no se negocia”.
Por su parte, Daniel Ricci, representante de la Federación de Docentes de las Universidades, enfatizó la convocatoria a la manifestación y destacó que la marcha es “en defensa de toda la universidad pública”. “Más allá de nuestros salarios, entendemos que la universidad pública es orgullo para todos los argentinos”, explicó
La semana pasada, la CGT había adelantado que participaría de la protesta por el financiamiento a las universidades nacionales. “Como corresponde, la CGT va a dar todo el apoyo y va a movilizar el 2 de octubre en defensa del presupuesto universitario”,, señaló Pablo Moyano, quien no estuvo presente en el encuentro en Casa Rosada, en una nueva señal de su postura de no dialogar con el Gobierno.
Por otro lado, las autoridades nacionales describieron al sistema universitario público como “caro, inequitativo e ineficiente”, en un documento elaborado por el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales del Ministerio de Capital Humano. En una rueda de prensa previa a la Marcha Federal Universitaria del próximo miércoles 2 de octubre, funcionarios de la Secretaría de Educación insistieron con la falta de transparencia del presupuesto universitario y aseguraron que la de mañana será una “marcha opositora”.
Diputados y senadores de la UCR, el PRO, la Coalición Cívica y Encuentro Federal llamaron a la ciudadanía a participar de la movilización. Los legisladores también adelantaron que en caso de que Milei firme el veto, buscarán insistir con el proyecto juntando dos tercios de los votos en ambas cámaras. Martín Lousteau afirmó que el gobierno nacional “no tiene una agenda para mejorar la educación universitaria”, sino que simplemente tienen la “intención de destruir la universidad pública”.
