Renunció el presidente del Senasa en medio de la disputa por la importación de vacunas veterinarias
Pablo Cortese, presidente del Servicio Nacional de Sanidad Agroalimentaria (Senasa), presentó su renuncia tras menos de ocho meses en el cargo, en el contexto de al disputa desatada por la importación de la vacuna contra la fiebre aftosa. Voceros de Agricultura confirmaron a este medio el paso al costado por “motivos personales”.
Aún así, en el entorno la pulseada por las vacunas importadas pesaba como explicación de la renuncia. La controversia se originó cuando, bajo la gestión de Cortese, Senasa facilitó la importación de productos veterinarios, una política impulsada por el gobierno de Javier Milei para reducir los costos en el sector agropecuario. Esta decisión provocó el rechazo de los laboratorios nacionales, que consideraron amenazada su posición en el mercado.
La tensión escaló cuando uno de los laboratorios más grandes del país envió una carta documento a Senasa por un lote de vacunas importado por una empresa competidora. Aunque Cortese calificó la acusación como “totalmente improcedente”, la polémica ya había tomado estado público.
El respaldo explícito de Javier Milei y del ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, a la apertura del mercado profundizó el aislamiento del funcionario.
Durante la Expo Rural, Milei afirmó: “Vamos a tener vacunas a mitad de precio”, mientras Sturzenegger sostuvo: “Nos están estafando”.
La Cámara de laboratorios (Caprove) advirtió que la liberalización de las importaciones pone en riesgo a una industria que emplea a más de 8.000 personas y exporta por más de 100 millones de dólares anuales.
La Cámara de laboratorios (Caprove) advirtió que la liberalización de las importaciones pone en riesgo a una industria que emplea a más de 8.000 personas y exporta por más de 100 millones de dólares anuales.